lunes, 22 de agosto de 2011
Se fuerte.
Después de un tiempo aprenderás que amar no significa apoyarse, y que compañia no siempre significa sinceridad. Comenzarás a aprender que los besos no son contratos, ni regalos, ni promesas... Comenzarás a aceptar tus derrotas con la cabeza erguida y la mirada al frente, con la gracia de un adulto y no con la tristeza de un niño. Descubrirás que lleva años construir confianza y apenas unos segundos destruirla. Madurar tiene más que ver con lo que has aprendido de las experiencias, que con los años vividos. Aprenderás que no importa en cuantos pedazos se partió tu corazón, el mundo no se detiene para que lo arregles. Entonces y sólo entonces, sabrás realmente lo que puedes soportar, que eres fuerte y que podrás ir mucho más lejos de lo que pensabas cuando creías que no se podía más.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario